Capítulo 18
Capítulo 18
Un tipo borracho a mi lado, tambaleándose, pasó por donde estaba él y mientras caminaba decía, - Rayos, ¿vieron a esa diosa en la entrada? ¡Es de otro nivel! Esa elegancia, esa presencia, jcaray!-
Su compadre le contestó, -Ni lo sueñes, hermano. Mujeres asi ni te rozan, a lo mucho podrias ser su
chofer-
– Ja, jhasta de chofer seria feliz! ¡Le manejaría gratis!+
Briar frunció ligeramente el ceño y al levantar la vista ahí estaba Melody, exudando un aura fría, con una mirada indiferente y unos rasgos bellisimos que gritaban desapego y distancia. Al verlo, un destello de pánico cruzó sus cautivadores ojos.
Briar simplemente se detuvo ahí parado, vistiendo una camisa blanca de corte innovador y pantalones de traje impecables que revelaban sus piernas rectas, calzando unos zapatos de alta costura, con la Ilave del coche en una mano y un abrigo colgando del otro brazo. Su rostro rebelde y atractivo, adornado con dos pendientes de diamante negro en la oreja izquierda que hacían juego con su mirada oscura e intensa. Parado en la entrada, imponente, atraia miradas de todos los transeuntes.
Él tenia ese tipo de presencia innata, capaz de hacer que todos lo notaran. Tenía rostro de escándalo, una estabilidad profunda que embrujaba a todas las mujeres, que se desvivian por lanzarse en sus brazos. This belongs © NôvelDra/ma.Org.
Se decía que Briar era el amor platónico de todas las mujeres de la ciudad, así que cuando, hace cincò años, Briar se casó con Melody, todas sintieron que habían perdido en el amor.
Ellas esperaban con ansias un escándalo, y cinco años después, Melody fue enviada a prisión por mismo, no sabían cuántos estaban silbando de alegria a sus espaldas.
él
Briar era perfecto en todos los aspectos, provenía de una familia prominente, con riqueza y poder, pero cuando se trataba de amor, nunca había ofrecido ni un ápice de cariño a Melody.
Melody se sentía trágica, este hombre no le pertenecía, pero pensó que si se mantenía fuerte y leal. podría conmoverlo. Se hizo la tonta por cinco largos años y cargó con la culpa otros cinco, pero después de diez años, finalmente comprendió que nunca podría tener un futuro con Briar, y el precio de entenderlo fue la ruina y la desolari
Briar y Melody se encontraron cara a cara en la entrada, separados por la multitud que iba y venía, como si pudieran atravesar esos rostros desconocidos y regresar en el tiempo a aquellos días, una eternidad en una mirada.
Él seguia siendo el amor de su vida, ella seguía siendo la joven en sus ojos.
El tiempo vuela, como las nubes cambian de forma. ¿Cómo llegaron a este punto? ¿Quién había estado maniobrando tras bambalinas?
Melody dejó de lado sus pensamientos erráticos y alzó la vista hacia Briar, que se acercó paso a paso, radiante y majestuoso, opacando a todos a su alrededor hasta que se detuvo frente a ella.
Cuando él se acercó, Melody se dio cuenta tristemente de que su corazón ya no se alteraba.
Briar, ¿sabes que te he amado desde mi juventud, por quince largos años, soportando toda una vida de amargura?
Le echó un breve vistazo à Briar antes de desviar la mirada. Briar, a su lado, comentó con indiferencia, -¿Cuánto tiempo has esperado?-
Capitulo 18.
-No mucho, solo unos diez minutos.-
Melody le ofreció una sonrisa que era tan elegante que nadie podría encontrarlé defectos, pero justo esa apariencia hacia que Briar se sintiera extraño.
Antes, siempre era amable y abierta, sus ojos llenos de amor, pero ahora, esos ojos se habían convertido en un pozo seco, donde el orgullo de sus años jóvenes se había desplomado y desaparecido, dejando atrás un vacío.
Briar sintió un escalofrio en el corazón pero se contuvo y le dijo, -Vamos arriba, ven conmigo.-
Dicho esto, presionó el botón del ascensor y cuando las puertas se abrieron, aparte de ellos, nadie más se atrevió a subir y compartir el ascensor con ellos.